Después de unos días enfermito y de muchos días disfrutando de las fiestas del pueblo que es el eje del universo, Bilbao, por fin puedo comunicarme de nuevo con el mundo desde mi nueva ubicación secreta cercana a mi amante bandido, bandido.
Por ahora me conformo con deciros que vivo un estaod de emancipación transitoria y que tengo esperanzas puestas en esta libertad pasajera. Además, tengo que comentar los resultados de la última encuesta, que dejan claro que tres de cinco lectores prefieren al Village People policía, mientras que hay un partidario del indio y otro del vaquero. El resto del mundo, no lee el bitácora, como es lógico, jajajajaja.
Bueno, después de este brevísimo y escueto artículo que evidencia mi renacimiento tras la enfermedad, me despido hasta pronto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario